Perder la Panza con la grasa beige

Al intentar Perder la Panza, una de las equivocaciones más frecuente es considerar que debemos eliminar todas las grasas para bajar de peso. Perder de peso es un proceso centrado en un único tipo de grasas, las otras pueden ayudar.

Este artículo es una selección del artículo: La grasa beige y perder panza, donde dispone de información más amplia.

No estamos solos, el problema del sobrepeso está siendo considerado cada vez por mas especialistas como una enfermedad, un problema que afecta a la sociedad en su conjunto por los trastornos que ocasiona.

En este sentido la ciencia se ha puesto a trabajar y ha conseguido, en los últimos tiempos, progresos muy esperanzadores.

Inicialmente la grasa era considerada como una unidad. Los avances tecnológicos han permitido distinguir varios tipos:

• Blanca: La única causante del sobrepeso.
• Marrón: Presente en los bebés y causante de su regulador térmico. Cuando el bebé tiene frío, un mecanismo interno hace que genere este tipo de grasas que produce calor al quemar grasas blancas.

Aunque sólo está presente en los bebés, últimamente se había estudiado mucho sobre como activarla al considerar que también estaba presente en adultos.

Estudios recientes demuestran que los adultos no disponemos de este tipo de grasas, pero disponemos de un nuevo tipo:

• Beige: Esta grasa se produce a partir de la grasa blanca, está presente en las personas adultas y tiene dos virtudes que la hacen muy interesante: Al igual que la grasa marrón, esta grasa consume literalmente la grasa blanca y, a diferencia de la grasa marrón, es relativamente fácil inducir que nuestro cuerpo la produzca.

En el enlace origen podrá ampliar información de cómo activarlas de manera natural.

 

Meteorismo al perder panza.

Hemos encontrado un curioso artículo en Perder Panza y Exceso de Gases sobre uno de los “problemas laterales” que puede tener nuestro plan para perder peso. 

No es un tema del que se suela hablar de manera abierta y, por ello, hemos considerado importante dedicarle este post. 

Al modificar nuestros hábitos alimenticios, es posible que nuestro cuerpo reaccione con una mayor producción de “gases” – el conocido como meteorismo -. Nada peligroso pero que puede resultar muy molesto por dos razones: en las personas con problemas en su expulsión, puede generar molestias e incluso dolores abdominales, en las personas que no tienen problemas en su expulsión, si puede generar problemas en su retención que perjudican sus relaciones sociales.

 De todos es conocido que las legumbres, sobre todo si están poco cocinadas y masticadas suelen ser grandes productoras de gases, pero el artículo al que nos referimos no proporciona una visión mucho mas completa de qué productos pueden esas provocando el problema y de cómo solucionarlo.

Ejercicios sin máquinas

Una pregunta habitual es si para conseguir perder la panza de una manera efectiva es necesario acudir a un gimnasio o podemos hacerlo en casa. 

Acudir a un gimnasio tiene sus ventajas e inconvenientes: 

• Como ventajas podemos citar el disponer de un monitor que nos orientará, la disciplina de horario y trabajo que nos impone y el ambiente que nos envuelve. 
• Como inconvenientes tendremos la pérdida de intimidad, la sujeción a un horario y el precio. 

Nuestra meta no es llegar a ser culturistas, de esos que marcan unos músculos desproporcionados (a mayoría hasta huimos de ellos), lo que buscamos es perder peso, deshacernos de los kilos de mas que nos restan seguridad, agilidad, confianza, etc., y en este objetivo no se necesita trabajar con las máquinas que ofrecen los gimnasios. 

Investigando un poco en la red descubrirá que ha habido entrenadores que han desarrollado métodos muy efectivos sin tener que recurrir a las máquinas, hablamos por ejemplo de Charles Atlas o Joseph Hubertus Pilates, estos métodos, aunque concebidos para mejorar el estado físico y no para perder peso, tienen probada su eficacia, con lo que se demuestra que no es necesario el uso de máquinas para perder peso. 

Existen ejercicios específicos para bajar de peso, pero recordemos que las casas no se comienzan por el tejado, primero tendremos que aclimatar nuestro cuerpo de una manera paulatina. 

¿Comenzamos haciendo spinning o comenzamos por coger la bicicleta del niño y nos damos un paseo?. Nuestro objetivo es perder la panza, bajar de peso, perder los kilos de sobra, como quieran llamarlo, pero -sobretodo- hacerlo de una manera segura, sin lesiones y duradera. 

Comencemos poco a poco, siendo conscientes de nuestro estado físico inicial, informándonos de la manera correcta de realizar los ejercicios y conseguiremos rentabilizar nuestro esfuerzo. 

 Para mas información visitar el artículo: ejercicios sin aparatos.

Dormir para bajar

Todos deberíamos tener en cuenta que para bajar, además de hacer dieta, hay que tener en cuenta otros aspectos del estilo de vida, cosas como: la actividad física que realizamos, el nivel de estrés que soportamos y muy importante: la cantidad de tiempo que dedicamos a dormir. 

Cada vez hay más estudios que demuestran la estrecha relación existente entre dormir poco y el riesgo de sufrir obesidad. 

Al parecer la falta de sueño altera la secreción de hormonas estimulantes del apetito. Cuanto menos dormimos mas apetito tenemos y menos saciados estamos, mas hambre tenemos y mas difícil nos resulta perder la panza. 

Por esa razón, para prevenir la obesidad y facilitar la pérdida de peso, además de cuidar la alimentación y hacer ejercicio, debemos dormir por lo menos 8 horas diarias. 

Puede obtener más información en el enlace: dormir adelgaza. 

Recuerde: 

Con sólo que duerma una hora más al día logrará perder peso más fácilmente puesto que su organismo segregará menor cantidad de hormonas relacionadas con el apetito. 

La Dieta: Sin riesgos.

El título de nuestro blog puede parecer sarcástico e incluso para algunos puede resultar "de mal gusto". Sepan que no hay nada más alejado de nuestra intención. 

Desde ComoPerderPanza queremos mostrarle consejos que le ayudarán a perder peso, a liberarse de esos antiestéticos kilos de más, pero no sólo por cuestiones de estética sino por los motivos de salud que implica. 

Tener un peso apropiado le permitirá disponer de un estado de salud mucho mejor, alejando los problemas que acarrea el sobrepeso: aumento del colesterol, problemas cardiacos, aumento en la probabilidad de sufrir determinado tipos de cáncer, problemas en las articulaciones, etc. 

No creemos que vayamos a descubrir nada nuevo si informamos que mantener su estilo de vida actual no va a permitirle bajar de peso: a fin de cuentas, es gracias a él que tiene esos kilos de los que desea deshacerse. 

Luego tendremos que hacer cambios y uno de los primeros planteamientos es comenzar a aplicar una dieta, ahí. viene la primera pregunta: 

 

 ¿Qué dieta escojo? 

La respuesta es muy sencilla: Consulte con su médico de cabecera o su nutricionista. 

No intentamos desanimarle y decirle que no busque la respuesta a su problema. 

Un derecho fundamental de cualquier persona es el de buscar las soluciones que mejor se apliquen a sus problemas por sí mismo, su autonomía para decidir qué es lo que le conviene. 

Ahora bien, desde esta página lo que sí vamos a recomendarle es que no corra riesgos: 

• Las dietas rápidas, las que prometen resultados casi instantáneos, no suelen ser equilibradas y pueden, por tanto, ser más perjudiciales que beneficiosas. 


• Las dietas milagro son -simplemente- pura farsa. Las relaciones son sencillas: tanto meto, tanto consumo, tanto me queda. Lamentablemente estas dietas se han demostrado frecuentemente como muy peligrosas para la salud o, como decíamos, puro engaño. 

Una vez haya investigado y haya decidido cuál es la dieta que mejor se adapta a sus necesidades, no corra riesgos: consúltelo con su médico y que le ayude a mantener un control sobre su evolución. 

Puede encontrar más información al respecto pinchando aquí. 

Adelgazar para vivir 

Nunca deberíamos perder de vista el objetivo: esta es la única vida que vamos a tener, no es un entrenamiento previo al partido, por tanto deberíamos intentar aprovechar cada momento de la misma. 

Recuerde siempre que el primer objeto de perder peso es tener un estado de salud que nos permita disfrutar el máximo tiempo de esta vida y hacerlo en las mejores condiciones posibles. Luego ha llegado el momento de ponerse a la labor. 

Se acabaron las escusas, es el momento de tomar las riendas y cambiar su vida.